Para construir un vínculo hay que tener tiempo, ganas e interés. Y sobre todas las cosas, confiar en que la otra persona tiene buenas intenciones, aunque dicen que de buenas intenciones está empedrado el camino al infierno.
Al inicio de una relación se dicen muchas cosas que normalmente han sido bien pensadas y son políticamente correctas en el lógico y natural intento de agradar al otro en las primeras citas.
Es probable que quien dice esta frase y otras muy similares, no esté preparado para iniciar un vínculo afectivo con otra persona. No quiere decir que no le gustes, pero este no es el momento propicio; sus energías seguramente estarán volcadas en cerrar el ciclo anterior. Ten cuidado con hacer parte del naufragio de otro barco que no es el tuyo.
“No soy bueno para tener pareja” o
¡Ojalá! tú seas la horma de sus zapatos, pero claramente, si a alguien le cuesta mantener una relación de pareja es porque generalmente busca características muy específicas en el otro, o porque nunca se ha enamorado. La buena noticia es que puedes llegar a ser ese alguien especial, pero vas a tener que armarte de paciencia porque pareces estar ante un hueso duro de roer.
En general quienes se la pasan hablando de sus anteriores relaciones están anclados al pasado. Presta atención a esta señal ya que puedes estar frente a una persona insegura que necesita demostrar que ha sido importante para otros, seguramente necesita ayuda para vencer sus temores, pero cuida que su pasado no termine por convertirse en una carga pesada para ti.
Escucha claramente y regístralo. Todos, y con mayor frecuencia las mujeres, tenemos la tendencia a creer que alguien que no está interesado en un compromiso de momento, va a cambiar de idea cuando nos conozca mejor. Esto es un gran error. Si no quiere compromisos, no lo quiere ni contigo, ni con nadie. Probablemente, tampoco los quiere consigo mismo.
Nadie está realmente tan atareado con miles de cosas que no pueda sacar tiempo para compartir con alguien a quien quiere. Piensa si deseas correr el riesgo de iniciar una relación con alguien que demuestra tan pocas ganas de dar, si es así debes tener muchísima paciencia, quizás logres que pase de “estar con mil cosas” a estar tan solo “con cien cosas”.